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Robert Greubel y Stephan Forsey son dos jóvenes ambiciosos que han dedicado sus esfuerzos a desarrollar y precisar los sistemas más complejos que jamás haya visto un reloj, y parece ser que lo han logrado.
En la mayoría de sus relojes encontramos algo que llama particularmente la atención: las cajas son asimétricas, diseñadas particularmente para los mecanismos de sus relojes.
Así pues, las inconfundibles formas dan a los relojes un enorme reconocimiento que es apreciado por la mayoría de sus compradores. Aun así, las innovaciones siguen ganando protagonismo.
El “tourbillon” desarrollado por Abraham Louis Breguet, que apenas se modificó desde 1795, fue modificado por Greubel y Forsey.
Hoy por hoy, apenas encontramos relojerías que hayan registrado tantas patentes como esta prestigiosa pareja.
Justo dos años después de la fundación de la compañía en 2004, lanzaron la patente del “tourbillon” de 24 segundos en colaboración con Harry Winston.
En 2008 publicaron el “Tourbillon Quadruple” con unas características que nunca antes se habían visto. Con esto se entró en una nueva era de los relojes de muñeca.
Muchos premios y patentes precedieron este momento, culminando su trayectoria con el GPHG (Grand Prix d’Horlogerie de Geneve) en 2012.
Tan solo 3 años más tarde ganaron este prestigioso premio con el “Compteur Mechanique”, que resultó en 3 nuevas patentes.
Solo queda esperar con qué otros inventos y novedades nos sorprenderán estos respetados hombres en el futuro.